A raíz de la pandemia de COVID-19, muchos eventos han debido ser cancelados o reconvertidos a una versión online en un breve plazo, lo que presenta varios desafíos.
No basta con transmitir el evento por Internet tal como se había planeado originalmente, sino que el contenido debe ser adaptado a este nuevo formato. Estas son algunas claves para lograr una buena adaptación y que el evento siga siendo interesante aunque ya no sea en persona.
- Sesiones digeribles: En contraste a los eventos en persona, la capacidad de poner atención de los asistentes virtuales es más breve. Para intentar mantener a la audiencia lo más atenta posible, las sesiones deben ser más cortas y mantenerse interesantes, con una duración óptima entre 7 y 15 minutos.
- Contenidos variados: Tal como en un evento en persona, la variedad del contenido es crucial. Es clave mantener a una diversidad de audiencias interesadas, así que piensa en una combinación balanceada de diferentes tipos de contenidos (de líderes, clientes y ventas por ejemplo).
- Networking: Gran parte del atractivo que tienen los eventos en persona es la posibilidad de conectarse con otros asistentes. Con un evento virtual esto es más difícil de lograr, así que es importante pensar en maneras de generar participación durante el evento, incluyendo formas de conectarse usando redes sociales.
- Comunicar de manera abundante: Antes del evento, entrega tanta información como sea posible a la audiencia. Intenta que la experiencia sea fácil para el usuario, que puedan conectarse desde cualquier parte y funcione bien.
- Mantener la sorpresa: Crea momentos "peak" durante el evento, como por ejemplo premiaciones, destacar clientes, entrevistas uno a uno o presentaciones especiales, que hagan atractivo tu evento.